Continuando el artículo de las estadísticas del 2021
En la revista anterior, nuestro compañero Juan Jaume del CC Llucmajor tuvo el detalle de hacernos llegar un artículo en el que reflejaba las estadísticas de la temporada pasada y nos lanzaba una serie de preguntas a las cuales me entraron ganas de responder y ampliar… ¡¡ahí vamos!!
¿Los días que se llevaron a término las sueltas eran tan malos como se quiere suponer?.
Aquí tocamos un término que es interesante analizar porque hay puntos de vista enfrentados. Y es que hay gente que confunde el poder soltar en días mejores con decir que el día es malo. En este aspecto, creo que el cambio de directiva en el Grupo Mallorca nos ha aportado una mejora en este aspecto en comparación con la política que se estaba aplicando en los años anteriores por la anterior junta, y ojo… con ello no quiero criticar la intencionalidad que tenía esa filosofía que no era otra que mirar por el bien de las palomas, pero creo que se estaba dejando de lado un poco el bien de los colombófilos y el valor del esfuerzo que realizan los que tienen buenos resultados.
Las velocidades que marcaron las primeras palomas no nos hacen entender que sean malas las condiciones y mucho menos que sean para tener esos porcentajes. Por la forma en la que se enfoca el escrito, y por cómo está presentada la segunda pregunta, creo que coincido con Juan Jaume en que las causas del problema están más bien en otro lado.
¿Por qué se dejaron de cronometrar tantas palomas?
A los números presentados por Juan Jaume, voy a aportar otros que creo que también pueden llevarnos a lo que puede ser una de las causas. Tras la parada del año 2020 por el COVID que provocó quedarnos con un mayor número de palomas en nuestras instalaciones, la venta de anillas del año siguiente no se redujo notablemente y menos si las comparamos con las anillas vendidas al año siguiente después de la temporada que tuvimos:
- Anillas de nido 2019: 36000
- Anillas de nido 2020: 34100
- Anillas de nido 2021: 31300
Creo sinceramente que la mayoría de los palomares tuvieron un número mayor de palomas que en años anteriores lo que hizo que las palomas no estuvieron en las mejores condiciones deseables. Lo segundo es que el hecho de parar prematuramente la temporada 2020 hizo que nos quedáramos con palomas mucho menos seleccionadas y estoy seguro, en términos generales, que se quedó mucha “morralla”. No tengo el número delante, pero estoy seguro de que la temporada pasada fue una de las que mayor número de palomas se apuntarían en el Grupo Mallorca.
A veces pienso que, en muchos sitios, el peor enemigo que tienen las palomas no es el halcón peregrino sino el propio colombófilo durante los meses de más calor y muda que suelen coincidir con las fechas en las que los palomares tienen el mayor número de atletas dentro.
De cara a la competición siempre tengo clara una idea… “Las temporadas se ganan en los concursos de Marzo y Abril pero se pierden en los cuidados de los meses de Julio y Agosto”
Mi respuesta a este punto me lleva a lanzar una tercera pregunta…
¿Qué le convendría más a la salud de la Colombofilia Balear… CALIDAD o CANTIDAD?
Estoy seguro que muchos de vosotros nada más leer la pregunta se habrá respondido sin pestañear que CALIDAD, por supuesto. Y entonces, ¿por qué todos los números indican que todo va encaminado a mejorar en base a CANTIDAD?
Sinceramente creo que CANTIDAD es la variable más fácil de resolver de las dos pero que también es la opción más cómoda que tiene el colombófilo para tapar sus propias limitaciones. ¿Cuántas veces hemos escuchado decir “tendremos que criar más pichones el año que viene para poder llegar a marcar en todas las sueltas o llegar a final de temporada”?
¿En serio hay gente que piensa que es necesario guardarse 40 pichones con una suelta de Ibiza para poder disfrutar la temporada siguiente?… Yo soy de los que piensa que “en absoluto”. Haciendo números gordos, con la intención de que sirva de ejemplo, eso podría suponer llegar a final de temporada fácil con 20 palomas supervivientes de las penínsulas, lo que nos lleva ya a sumar 60 palomas dentro del palomar en Abril. Por otro lado, empezaría ya la temporada de cría de la siguiente “pichonada” que podría ser fácilmente de 140 anillas compradas (la mentalidad es: “¡¡hombre!!… si me quiero quedar con 60 pichones, tengo que empezar las Ibizas con 80-90 palomas y contando con las que se pierden en los entrenos y volando en casa se nos va a ese número”). Eso suma un total de 200 palomas… ¿¿¿EN SERIO ES NECESARIO????. ¡¡¡Luego nos quejamos de lo caro que se está poniendo todo!!
Creo que todos deberíamos hacer una reflexión sobre esto y mentalizarnos en reducir el número de nuestras colonias. Desde mi punto de vista, todo serían ventajas. Reduciríamos el número de palomas de nuestros palomares, lo que nos hace ganar en salud. Reduciríamos el gasto de mantenimiento y tratamiento de nuestras palomas, lo que hace que nuestro bolsillo nos lo agradezca. Reduciríamos el número de palomas inscritas a principio de temporada en el Grupo Mallorca, lo que nos hace que cada uno de nosotros pueda enjaular más palomas por suelta e incluso no tener que usar dos camiones llegados a según que punto de la temporada.
Eso sí, en contrapartida, el colombófilo deberá ganar en calidad, en esforzarse más, en hacer mejor las cosas y en buscar como mejorar su método. ¿Acaso alguno de vosotros piensa que los que siempre están arriba, como por ejemplo Víctor Salado o Toni Perelló, lo consiguen a base de calidad de sus palomas o cantidad de ellas?. Conseguir eso les supone a ellos un gran esfuerzo y sacrificio… cosa que los habrá que no están dispuestos a invertir en ello.
Seguro que alguno en este punto ya habrá pensado para sí mismo “si se apuntan menos palomas, seguro que nos sale más caro viajar”… Mi respuesta es: “Los gastos serán los mismos o incluso yo diría que menos”. Eso sí, lo que subiría es el precio a pagar por paloma. Para ayuda a pensar un poco, siguiendo el ejemplo anterior reflejaré unos sencillos números:
Pongamos que el precio por paloma sea de 2,70€… si el socio inscribe unas 140 palomas (90 pichones más unas 50 adultas del año anterior) nos da la cifra de 378€. Si redujera su colonia en un 30% (100 palomas) saldría un precio por paloma de 3,78€, siendo extensible a todos los palomares. Parecería que nos sale más caro pero estaríamos pagando lo mismo mientras que por otro lado estaríamos ahorrando el coste de lo que vale mantener 40 palomas todo un año… Salen las cuentas?? Jejeje.
Sinceramente creo, que uno puede conseguir los mismos resultados una temporada con menos palomas del año anterior pero más trabajadas o exigidas y para ello siempre mi propuesta ha sido la de exigir que un pichón haga península y pase por reloj para ser considerada viajada, Algunos compañeros siempre me han dicho que hay líneas que el primer año no se les puede exigir más que Ibiza porque sino se pierden y en cambio al año siguiente se les puede pedir lo que sea. Perfecto…en ese caso, a esas líneas de palomas que no se le den península. Al año siguiente siempre las podrá enjaular en la bandada libres sin problema alguno.
Creo que estamos a tiempo para conseguir una colombofilia mejor así que os invito a cada uno de vosotros a reflexionar sobre la idea que aquí he querido trasladar. Estaré encantado de ver respuestas que debatan las mías para ser publicadas en revistas siguientes.
Un abrazo a todos.
David Fernández
Giem un zurito de gran fondo enhorabona Pen Toni y en Llorens
Hola Antoni, i que trobes d'aquelles primeres amollades a 60km? Saludos!
Hola Esa es una de las ideas que tuve hace años Un campeonato antes de final de año y seguidamente…
A veure si me aclar: - Amb el vostre calendari la temporada es de 4 m No de 6 -Eliminar…
Muy buena reflexión y estrategia. Si se complementan con 5 o 6 entrenos de club para q aprendan a separarse…